septiembre 29, 2009

Nunca juzgues a un libro por su portada...

A veces, la moda y la literatura unen sus fuerzas. Para muestra, aquí hay algunos casos.

Por un lado tenemos a la editorial Penguin Books que ha lanzado, a tiempo para la New York Fashion Week y dentro de su colección de libros Classics Deluxe (Clásicos de Lujo), una línea "couture-inspired" para coleccionistas y amantes de una visión más creativa. Para ello, han llamado nada menos que al renombrado ilustrador de modas Ruben Toledo, quien ha trabajado para publicaciones como Vogue, Harper's Bazaar, Visionaire, The New York Times o Interview, por nombrar algunas.

La editorial le encargó al artista de origen cubano que trabaje sobre las portadas de tres grandes clásicos: "Orgullo y Prejuicio" de Jane Austen, "La Letra Escarlata" de Nathaniel Hawthorne y "Cumbres Borrascosas" de Emily BrontË.



Cada una de las ilustraciones posee una personalidad diferente, lo cual las hace aún más deseables para todas aquellas fashionistas que quieran tener entre sus manos algo nuevo y (relativamente) único del afamado ilustrador en su biblioteca -o en su cartera.

Por otro lado, se encuentra la norteamericana Caitlin Phillips, creadora de un línea de carteras realizadas con portadas antiguas de clásicos de la literatura.




Lectora incansable, esta ex empleada de una librería de usados se inspiró al ver cómo año tras año se desechaban grandes cantidades de libros antiguos por estar fuera de serie o maltratados por el paso del tiempo. Gracias a su pasión por las manualidades y el reciclaje, nació la idea de crear algo a partir de estos libros que, en su mayoría, poseían hermosas portadas, muchas de ellas ilustradas.



Phillips, quien vende sus productos a través del sitio Rebound Desings, remueve las páginas de los libros dejando sólo las tapas y el lomo. Luego, las forra con hermosas telas tratando de encontrar aquellas que parezcan que "hayan nacido del mismo libro". Los colores deben complementarse con los que aparecen en la portada y el motivo de la tela debe ser el apropiado. Por ejemplo, para realizar el libro-cartera de "Lo que el viento se llevó" utilizó reproducciones de motivos que eran populares durante la época de la Guerra Civil de los Estados Unidos.


Para finalizar, le agrega las manijas adornadas con canutillos y cuentas, y un broche que funciona como traba. Todo vintage.

Un dato: el book-bag más vendido es "Orgullo y Prejuicio" de Jane Austen.

Ya lo saben: a veces un buen clásico puede volver a estar de moda.

2 comentarios:

Gonzalo Rossello dijo...

Muy buena idea la de reutilizar los libros maltratados!

Igual no me termina de convencer las manijas, son todas iguales.

Saludos!

Crepusculo[guion_bajo] dijo...

una interesante forma de reciclar, igual me da la sensacion que mas de una persona va a comprar la cartera... pero nunca va a leer el libro...